En la provincia de Gerona, hay unas montañas, llamadas las Gavarras que se extienden desde Gerona hasta la costa. En ellas hay una alta concentración de dólmenes. Estos enterramientos del Neolítico (2500 A.C.) están escondidos en el bosque, en los lugares con mejores vistas del mar y las montañas. En contraposición a esto, los cementerios de la zona, pertenecientes a pueblitos medievales de la falda de las Gavarras, han quedado rodeados por carreteras y polígonos industriales.

Se propone recuperar el misticismo en el rito funerario, con un nuevo cementerio atomizado en las montañas. El 30% de los dólmenes se concentran en cuatro montes, por ello los llamamos los Montes Sagrados, y es aquí donde encontramos el nuevo cementerio. En el más alto, con vistas de las Islas Medas, se sitúa un velatorio y un Centro de Promación* recuperando la ruina de una masía como emplazamiento. Un velatorio es un lugar en el que no se quiere estar, por lo tanto, lo mejor es que desaparezca.. se utiliza acero inoxidable pulido para su construcción, de modo que por medio de la reflexión, la propuesta, formada por varillas hincadas en el terreno, se camufla en el entorno.
Desde ahí, las familias comienzan un recorrido por la montaña hasta el lugar elegido para el entierro de la urna. Pueden elegir tres caminos, uno hacia el Este, otro al Oeste y otro al Sur, que llevan a los tres Montes Sagrados. Los caminos no se manifiestan, no están pavimentados. El usuario se mueve hacia los Montes Sagrados de forma natural atravesando los Bosques Sagrados. Éstos tienen una variedad cromática diferente al resto de la montaña, que con la mínima pendiente, guían al usuario a través del bosque de forma intuitiva.
*La Promación es un nuevo sistema ecologico en el tratamiento de cadáveres (Originario en Suecia en 2009).