Este proyecto aborda la rehabilitación de la ciudad consolidada afrontando la tarea de intervenir con la multiplicidad de agentes y propietarios en una escala de barrio. Se ofrece una estrategia progresiva y contenedora de pautas para un cambio radical de ciudad y paisaje, de forma de relación social entre ciudadanos y de la necesaria actualización de vivienda.
El tejido urbano consolidado elegido será el Barrio del Pilar en Madrid con más de 50años de antigüedad. Éste se encuentra en una situación de degradación y abandono (del 4,5% al 6,3% de vivienda abandonada desde 2001 a 2011). Se procede a un análisis de los problemas que explican esta situación. Los motivos son: un parque de viviendas obsoleto (69% vivienda de 50m2 y dos dormitorios y el 31% restante conformado por vivienda de 3 dormitorios de 60 y 70m2), un plano del suelo aterrazado y discontinuo repleto de escaleras, una población altamente envejecida y una falta de identidad que dificulta cualquier orientación dentro del tejido.
La estrategia que se sigue recalifica primero los espacios mediante la re-jerarquización del espacio público del plano del suelo (el 65% del plano del suelo es superficie libre) desde los que se organiza la arquitectura que va dominando la topografía eliminando las escaleras y dotando de accesibilidad al tejido haciendo posible el paso a bomberos, ambulancias y camiones de mudanza. Para después extender este proceso de revitalización a lo construido, es decir, a los bloques. En ellos se van a emplear operaciones de pequeña escala para producir una mejora en la vivienda, su perfectibilidad y variedad tipológica. Las operaciones ciadas serán 3. La sustitución de entrevigados por forjados inclinados, una nueva estructuración de los cerramientos, la ampliación de voladizos y por último la recualificación del espacio común público que ya no se limitará a un núcleo de comunicación.